Politica de AICG

Generación de Contenido de Inteligencia Artificial (AICG)

Las herramientas de generación de contenido de inteligencia artificial (AICG), como ChatGPT, Perplexity, Elicit, Iris y otras herramientas basadas en grandes modelos de lenguaje (LLM.Large Language Models), solo pueden iniciar investigaciones originales de forma independiente con la guía de autores humanos. Tampoco pueden asumir la responsabilidad de un trabajo publicado o un diseño de investigación, un requisito fundamental típicamente asociado con la autoría. Además, necesitan más estatus legal y capacidad para poseer o asignar derechos de autor. En consecuencia, en línea con la postura de COPE sobre las herramientas de AICG, no es apropiado designar estas herramientas como autores de un artículo o incluirlas en la lista de autores. Si un autor emplea dicha herramienta al crear cualquier parte de un manuscrito, debe describirse de manera transparente y completa en la sección Métodos o Agradecimientos. El autor asume toda la responsabilidad por la exactitud de la información generada por la herramienta y por la atribución adecuada a cualquier investigación de respaldo en la que se base esa información. Es importante tener en cuenta que las herramientas utilizadas para la revisión ortográfica, la corrección gramatical y la edición general están fuera del alcance de estas pautas. La determinación final de si el uso de una herramienta AICG es adecuado o permisible en el contexto de un manuscrito enviado o un artículo publicado recae en el editor de la revista o en otra parte responsable de las políticas editoriales de la publicación.

Por lo tanto, como declaración de los editores de Scientia et PRAXIS sobre el uso responsable de herramientas de Generación de Contenido de Inteligencia Artificial (AICG) en la publicación de revistas académicas, somos signatarios de las siguientes declaraciones:
1. Los LLM u otras herramientas generativas de AICG no deben figurar como autores en los artículos.
2. Los autores deben ser transparentes en el uso del AICG y los editores deben tener acceso a herramientas y estrategias para garantizar la transparencia de los autores.
3. Los editores y revisores no deben confiar únicamente en el AICG generativo para revisar los artículos enviados.
4. Los editores conservan la responsabilidad final en la selección de revisores y deben ejercer una supervisión activa de esa tarea.
5. La responsabilidad final de editar un artículo recae en los autores y editores humanos.